El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, nombrará a una mujer como nueva portavoz del Ejecutivo para sustituir a Pilar Alegría, que concurrirá como candidata a las elecciones de Aragón del 8 de febrero. En conversación informal con los periodistas en la copa de Navidad de Moncloa, Sánchez no ha aclarado si la nueva portavoz forma parte del Ejecutivo como ministra o es externa al Ejecutivo.
El presidente tampoco ha avanzado fechas para este cambio, aunque todo apunta a que será antes de fin de año. De esta forma, ha dejado fuera de las quinielas al ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, así como al responsable de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López. Aunque aún no está claro si la nueva portavoz es una ministra actual, en el caso de que así fuese, entrarían en la quiniela Diana Morant, Ana Redondo, Sara Aagesen, María Jesús Montero, Margarita Robles, Elma Saiz e Isabel Rodríguez.
Sánchez ha asegurado que está muy contento con el actual Consejo de Ministros y que su proyecto trasciende de 2027. De hecho, ha descartado una remodelación en profundidad de su Ejecutivo como le pide Sumar, asegurando que él está más en el impulso de la acción de Gobierno que en su composición. De hecho, también ha descartado una salida inmediata de Montero, al señalar que a la vicepresidenta aún le quedan los Presupuestos Generales del Estado (PGE), la quita de la deuda o la financiación autonómica. "Aún le queda", ha dicho al respecto.
Lo que sí va a ser un hecho es la salida de Alegría, aunque todavía queda por precisar si quien ocupe la Portavocía también se hará cargo de los departamentos de Educación, Formación Profesional y Deportes.
Esta sería la quinta mujer consecutiva que ocuparía el cargo como portavoz desde que Sánchez está al frente del Gobierno, de hecho, ningún hombre ha estado al frente de este puesto durante su mandato. La primera fue la actual embajadora ante la Santa Sede, Isabel Celáa; a continuación, la actual vicepresidenta primera, María Jesús Montero, posteriormente la actual ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez y en la actualidad Alegría. Aunque en esta ocasión había quinielas que apuntaban a Bolaños y a López como nuevas voces del Ejecutivo, Sánchez continúa con su tradición de nombrar a mujeres al frente de este cargo.
Además, este cambio en el Gobierno se produce en medio de una crisis por los casos de acoso sexual en el PSOE, todos ellos perpetrados por hombres, lo que podría poner el cuestión el nombramiento de uno al frente de la Portavocía del Ejecutivo.
Al respecto de esta crisis, que saltó con unas primeras denuncias por acoso a Paco Salazar, Sánchez ha dicho que no ve fuego amigo y que se siente muy respaldado por la organización. Ha reconocido que no sabe si van a seguir saliendo más casos de acoso, pero lo que sí puede hacer es garantizar la actuación del Ejecutivo al respecto. "Cometí un error, no voy a cometer dos", ha aseverado.