En octubre de 2024, la Comunidad Valenciana vivió una de las peores inundaciones de su historia reciente. La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) dejó a su paso consecuencias devastadoras con una suma de 230 fallecidos, incontables daños materiales, viviendas inhabitables, centros educativos clausurados y familias enteras en situación de vulnerabilidad.
Un año después, Fundación Naturgy ha lanzado la iniciativa “Sumando Energías por Valencia”, un plan integral que se extenderá hasta finales de 2026 con el objetivo de impulsar la recuperación de los territorios afectados. El programa tendrá un impacto en más de 40.000 personas y se centrará alrededor de cuatro ejes fundamentales: personas, educación, empleo y medio ambiente.
Según María Eugenia Coronado, directora general de Fundación Naturgy, “ninguna transformación ocurre en solitario: cada avance es fruto de muchas manos, ideas y voluntades que se unen por un propósito común. Por eso, este proyecto expresa parte de esa convicción: que la fuerza está en la suma, en la comunidad, en la energía colectiva que impulsa acciones positivas para la sociedad. Porque cuando colaboramos, la sociedad avanza”.
La fuerza de la comunidad
El programa no solo reacciona ante la emergencia, sino que plantea soluciones sostenibles, con una clara vocación de futuro. De entrada, uno de los pilares es la mejora de la calidad de vida de las personas afectadas por la DANA.
Fundación Naturgy trabajará en la rehabilitación energética de viviendas, mejorando aislamiento, sistemas de ventilación, calefacción e instalaciones eléctricas o de gas, entre otras intervenciones. Además, se van a financiar 7 rehabilitacionesen centros de atención social también dañados por las inundaciones de entidades que participaron en la convocatoria de ayudas que Fundación Naturgy lanzó el pasado mes de octubre.
Otra medida destacada es la donación e instalación de paneles solares en centros de atención a personas en situación de vulnerabilidad, con el objetivo de reducir el gasto energético y liberar recursos para atención y ayuda. La Escuela de Energía de la Fundación también intensificará su labor en los municipios afectados, ofreciendo talleres formativos a familias, técnicos municipales y entidades del tercer sector sobre uso eficiente de la energía.
Educación
El plan contempla acciones educativas en más de 130 centros escolares de 38 municipios. En 40 de ellos, se instalarán placas fotovoltaicas que permitirán reducir el coste energético y destinar más recursos a necesidades pedagógicas, emocionales y comunitarias. Este concepto nace como una herramienta educativa donde el alumnado y profesorado participan activamente, creando Consejos Energéticos Escolares. Además, estos colegios se integrarán en la red educativa Efigy Schools del programa Efigy Education, con un acompañamiento integral a los centros educativos durante un año, donde se llevarán a cabo actividades como talleres, experiencias digitales, programas de mentorías...
También se impulsará la participación de escuelas valencianas en las iniciativas Efigy Girls, que promueve vocaciones STEAM (Science, Technology, Arts, Engineering, and Mathematics, por sus siglas en inglés) en niñas de 9 a 13 años, y en el Certamen Tecnológico Efigy, donde estudiantes de ESO resuelven retos relacionados con la sostenibilidad.
Empleo
La DANA no solo afectó viviendas e infraestructuras; también tuvo un serio efecto en el empleo local. Por ello, la fundación ha diseñado un plan de formación profesional orientado al empleo, especialmente en sectores clave relacionados con la transición energética y la construcción sostenible dirigidos a personas en situación de desempleo, vulnerabilidad o jóvenes que buscan mejorar su acceso al mercado laboral. El objetivo es mejorar la empleabilidad de personas residentes en los municipios afectados por la DANA.
Los cursos, gratuitos y con certificación oficial, se centran en la instalación y mantenimiento de placas solares, rehabilitación energética de edificios, digitalización de redes de gas o la instalación de gas y puesta en marcha de sistemas certificados. Todas estas formaciones se desarrollan en alianza con universidades como la Universidad Politécnica de Valencia y la Universidad Politécnica de Madrid, entre otras instituciones.
“Tras la DANA el empleo se ha visto muy afectado, y hay una gran necesidad de recualificación de profesiones a esta nueva realidad. Por ello, no solamente formaremos a las personas, sino que las acompañaremos en un proceso que les permita realizar sus prácticas en las iniciativas vinculadas a este Plan”, aclara Coronado.
Medio ambiente
La recuperación ambiental es otro de los pilares de la iniciativa “Sumando Energías por Valencia”. En este caso, la fundación ha puesto en marcha un programa de voluntariado ambiental que moviliza tanto a empleados de la compañía como a la ciudadanía local, para retirar residuos en zonas afectadas, restaurar espacios naturales y ocuparse de la reforestación y recuperación vegetal.
La primera jornada del programa se desarrolló en la zona de La Pedrera, en Torrent, junto al barranco de l'Horteta. Este cauce fue uno de los que más agua aportó al barranco del Poyo durante la DANA, provocando la destrucción de zonas de escorrentía, la pérdida de vegetación y la alteración de hábitats muy sensibles, como el de la tortuga autóctona. Cerca de medio centenar de personas formaron parte de este voluntariado ambiental en una experiencia que aunó la restauración ecológica, la educación climática y el compromiso ciudadano, en una experiencia transformadora a nivel social, emocional y ambiental.
En esta actuación, se plantaron alrededor de veinte ejemplares de especies autóctonas adaptadas al clima mediterráneo, como el pino mediterráneo de pequeño porte o carrascas, clave por su capacidad de fijación de suelo, resistencia climática y fomento de la regeneración natural. Estas especies ayudarán a reducir la velocidad del agua en futuras lluvias intensas, entre otras cosas.
La actividad, que contó con la colaboración de la ONG Belong to Sea y Natura y Cultura, incluyó un taller formativo sobre cambio climático y resiliencia territorial donde se expusieron temas como la importancia de la vegetación en la gestión del agua o buenas prácticas para el cuidado del entorno desde nuestro propio hogar.
Esta es la primera de las seis jornadas que Fundación Naturgy realizará en diferentes municipios valencianos durante los próximos meses. Tras la de Torrent, la fundación de la compañía energética llevará esta actividad familiar a Catarroja, Alfafar, Massanassa, Paiporta y Alborache.
El objetivo final es dejar una huella duradera en las personas, en los territorios y en el tejido social y ambiental de la Comunidad Valenciana.