Fría y lluviosa noche en Vallecas para cerrar la jornada 16 de LaLiga EA Sports entre Rayo Vallecano y Real Betis Balompié, en la que se guardó un minuto de silencio por un canterano rayista fallecido y en la que también hubo recuerdo en la memoria de muchos béticos para Pilar Del Prado.
Saltó con decisión el Betis al campo de Vallecas, con un Pablo Fornals muy activo en la mediapunta y avispado para recoger balones en la frontal y empezar a probar los reflejos de Batalla. La movilidad de Cucho y Antony y la intensidad de los de Manuel Pellegrini, clave para volcar el duelo en los primeros compases a su terreno.
En Vallecas el Rayo no se deja intimidar y rápidamente respondió a los verdiblancos con llegadas peligrosas. La primera la salvó Marc Roca en un centro lateral, en el que Llorente se fue al suelo y tuvo que ser sustituido por Bartra. El pivote, que cortó la primera acción de los de Íñigo Pérez, sería amonestado en el 9' al parar una contra peligrosa.
Tras los primeros tanteos de los de Pellegrini e Íñigo Pérez se equilibró la contienda en el feudo rayista, del que también se marcharía visiblemente dolorido Jorge de Frutos tras caer sólo después de ganarle el balón Natan, teniendo que entrar Fran Pérez en su lugar.
Le faltaba continuidad a las acciones de ambos conjuntos, con muchas imprecisiones fruto también de querer jugar en demasía al primer toque para eludir la presión rival. Cucho Hernández, fue el jugador del Betis que más cerca estuvo del gol tras un centro de Ruibal.
La ocasión más peligrosa de la primera mitad la tuvo el Rayo en una falta que botó Lejeune, despejó Valles y se estorbaron Isi y Nobel al ir a por el balón rechazado. Revisó De Burgos un posible penalti de Aitor a Álvaro, no validado por fuera de juego.
Estaba basando el conjunto de Pellegrini su fortaleza defensiva en un Marc Bartra imperial, organizando el juego desde atrás y ganando todos los duelos por anticipación. Al borde del descanso, el técnico santiaguino cambió por momentos a Roro y Antony de bandas para liberar al de Osasco.
A la vuelta de vestuarios se volvió a ver a un Betis que quería ir a por los tres puntos, saliendo con intensidad como en el primer acto. Fue Aitor Ruibal quien puso en apuros a Batalla en un tiro desde la frontal que le dejó Deossa.
La lluvia, persistente casi en todo el choque, ganó fuerza con el paso de los minutos en un encuentro muy trabado y sin un dominador claro en el juego.
A la falta de llegadas béticas quiso ponerle remedio Pellegrini con el cambio de Lo Celso por un cansado Nelson Deossa, retrasando a la base a Fornals junto a Roca y dejando al rosarino de '10', al que le costó entrar en juego y ayudar a voltear a un Rayo que impedía a los verdiblancos girarse y recibir con comodidad.
El paso de los minutos no mejoró al Betis, muy perdido en Vallecas, sin ideas y con llegadas muy contadas y de poco peligro. En el 73' le botó mal a Riquelme con todo a favor.
Pellegrini agotó los cambios con Pablo García y Sergi Altimira por Rodrigo Riquelme y Pablo Fornals, dejando a Marc Roca con amarilla. Tampoco mejoraron los verdiblancos con las últimas modificaciones sobre el verde. Gélido, como el ambiente, se quedó el Betis ante el Rayo, que tampoco hallaba la fórmula de imponerse ante una defensa heliopolitana atenta en los lances aéreos y terrestres.
Se encaminó a su final el encuentro en el campo de Vallecas sin que el Betis de Pellegrini pusiera, salvo alguna aislada, en apuros a Batalla. Mereció lo que se llevó, un punto, y por momentos se salvó como en el tiro de Isi al palo. El quinto puesto se queda a cinco. Al Rayo debía de haberle ganado si quería luchar por la Champions vía Liga. Se empieza a esfumar.
