Cuánto dinero gana la administración de lotería que reparte el 'Gordo' de Navidad

Escrito el 16/12/2025

El primer sorteo de la Lotería Nacional en España se celebró el 18 de diciembre de 1812 en Cádiz. Su objetivo era recaudar fondos para la campaña militar contra los franceses, y el premio mayor, conocido popularmente como ‘Gordo’, correspondió al número 03604, con un premio de 4.000 reales.

Desde entonces, el Sorteo de Navidad se ha consolidado como uno de los juegos de azar más populares del país. Cada 22 de diciembre, millones de españoles siguen con atención el sorteo, pendientes de los niños de San Ildefonso, con la esperanza de ser afortunados ganadores del 'Gordo'.

Este año el sorteo de Lotería de Navidad repartirá 2.772 millones de euros entre todos los premios, una cifra histórica. El premio Gordo de la Lotería otorgará 4 millones de euros por serie, es decir, 400.000 euros por décimo.

Las administraciones de Lotería que reparten los premios del sorteo celebran con alegría la fortuna de sus clientes. Además de la empatía que sienten hacia quienes resultan premiados, el establecimiento suele ganar cierta fama de lugar de buena suerte, lo que suele traducirse en un aumento de ventas en sorteos futuros.

No solo eso: la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado establece en su contrato que, en el caso del Sorteo de Navidad, todas las administraciones reciben una comisión del 4 % por cada décimo vendido, es decir, 0,80 céntimos de los 20 euros que cuesta cada décimo.

Existe, sin embargo, un rumor muy extendido: que los loteros reciben un extra si venden un boleto premiado. Esto no es cierto. Los administradores de loterías no reciben ninguna compensación adicional por vender un billete ganador; su ingreso proviene únicamente de la comisión por la venta de los décimos y, en su caso, de la gestión de cobro de premios si los clientes acuden a cobrar su boleto en el establecimiento.

Además, vender un boleto ganador puede traer otro tipo de ventajas como ganar más notoriedad, fidelizar clientes, y en algunos casos, cierta repercusión en los medios. Todo esto puede traducirse en un aumento de ventas en sorteos futuros. Por eso, aunque los loteros no reciban un premio extra en dinero, los beneficios para su reputación y su negocio pueden ser bastante valiosos.