El PP de Madrid ha celebrado este lunes su tradicional cena de Navidad en Alcorcón. Hasta la Finca La Alquería se han desplazado militantes, alcaldes y los integrantes del gobierno de la Comunidad de Madrid para escuchar el discurso de fin de año de Isabel Díaz Ayuso. La dirigente del partido autonómico ha estado acompañada, por cuarto año consecutivo, por el líder nacional, Alberto Núñez Feijóo. Las intervenciones han estado orientadas a hablar sobre los casos judicializados que salpican al Gobierno central y a Pedro Sánchez. Así, la presidenta de los 'populares' madrileños ha pedido a sus compañeros de partido estar preparados para recobrar el testigo, empezando en regiones como Extremadura.
"Estamos preparados para dar todas las batallas, esto va a implosionar en cualquier momento por mucho que Sánchez se intente atar a la Moncloa. Tenemos un proyecto que está esperando a que España nos dé la oportunidad. Vamos a hacerlo con convicción y pasión", ha manifestado Díaz Ayuso, al afirmar que la pasión será el lema del próximo año. La dirigente autonómica ha reiterado la posición que mantendrá su formación hasta las próximas elecciones: "Ser una alternativa para esta desgracia que tienen todos los españoles, que es Pedro Sánchez".
En esta línea, Ayuso ha expuesto que no es el momento de "ponerse tibios", sino de "llamar a las cosas por su nombre". Por ello, ha animado a denunciar cualquier injusticia, a pesar de las consecuencias: "Eso sí que ha sido siempre personalidad y una seña de identidad del Partido Popular de Madrid". Así, la dirigente autonómica ha hecho alusión a las palabras de la política venezolana, María Corina Machado, para hacer referencia a la gestión y trayectoria de Pedro Sánchez al frente del Gobierno de España: "La historia lo juzgará".
La dirigente de los 'populares' madrileños ha señalado que el único plan de Sánchez es "quedarse en el poder un día más". Sin embargo, ha vaticinado que se acerca un cambio de signo que comenzará en Extremadura y se extenderá por Aragón, Andalucía y el resto del país. Pero para ello, ha advertido, será necesario un plan claro para revertir los cambios adoptados por el Gobierno actual: "Qué herencia nos queda, cómo le decimos a los jóvenes que hay que esforzarse, a los autónomos que hay que emprender, cómo deshacer tanto daño, tanto abandono a los ojos del mundo", en alusión a los roces públicos entre España y EE.UU. Por ello, ha estimado que "es el momento de quemarse y lanzarse a la piscina", pero con un proyecto articulado con base a las necesidades y preocupaciones que han detectado en los últimos años por parte de vecinos y dirigentes locales.
La ronda de discursos la ha cerrado el líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, al posicionar a Madrid como la región que "empuja nuestro país". En sus palabras, Feijóo ha señalado que su orgullo por la gestión en la Comunidad de Madrid crece "a la vez que la rabia del PSOE contra el PP de Madrid. Cada ataque demuestra que están frustrados porque Madrid compite y lidera". Asimismo, ha apuntado que desde Moncloa, con todo el aparato del Estado, "no son capaces de doblegar a la región y derribar a su presidenta".
Entre los asistentes han estado el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida; la alcaldesa de Alcalá de Henares, Judit Piquet; o el alcalde de Móstoles, Manuel Bautista; y el portavoz del PP en Alcorcón, Roberto Marín. "No cabemos todos los que somos, tendríamos que reservar el Wizink Center, lo que es ahora el Movistar Arena, para celebrar nuestra cena de Navidad", ha indicado Ayuso al inicio de su intervención al referirse a la cantidad de personas congregadas.
Junto a las intervenciones del líder nacional y la dirigente autonómica. El portavoz del PP en Alcorcón también ha tomado la palabra para destacar la necesidad de un cambio de signo para acabar con "la decadencia de Alcorcón", revitalizando los servicios públicos, bajando impuestos y aplicando medidas para mejorar la seguridad local. Marín ha incidido en la idea de tener un gobierno "serio, coherente, estable y que cumpla con lo que promete" para que la vida de los vecinos mejore. Por su parte, el alcalde de Móstoles ha sido otro de los encargados de dar el discurso este año. En su opinión, "estamos en una democracia enferma" que requiere un giro radical, que solo se puede dar con el apoyo de los ciudadanos. Por ello, ha rememorado el valor de 1808 en "pro de la libertad" y para echar a Sánchez.
En tono regionalista, Ayuso, ha aprovechado su visita al municipio para dirigirse a todos los vecinos de la zona suroeste de Madrid. Así, ha lamentado que los políticos de izquierda suelten "discursos vacíos que no representan a la gente currante de esta zona, sin la que la capital no saldría adelante". Así, además, ha indicado que de cara a los próximos años preparan nuevas propuestas para estas zonas de la comunidad.